DAYMARE 1994: Sandcastle [Review]

Título: Daymare 1994 Sandcastle.
Género: Survival Horror.
Desarrollador: Invader Studios.
Editor: Invader Studios.
Fecha de lanzamiento: 30/08/23.
Precio: $3,999.99 ARS.
Plataformas: PC, Playstation 5 y Xbox Series.
Disponible en: Steam.
Review: Realizado en su versión de PC con una copia de prensa proporcionada por Invader Studios.

Fueron años de pura sequía, pero el terror ha comenzado a despertar de su eterno letargo con joyitas como Song of Horror, Tormented Souls, o Daymare 1998. Esta última nació inicialmente como un simple mod de Resident Evil 2, que posteriormente fuese paralizado por completo por el Remake de Capcom. Sin embargo, los italianos de Invader Studios decidieron aprovechar este momento para abrirse hueco dentro de la industria, y así fue como su mod tomaría daría lugar a un juego completamente nuevo, siendo Daymare 1998 la respuesta al icono de Capcom. Un Survival Horror con todas las letras que recuperaba ese sabor ochentero. Lejos de ser perfecto contaba con una fórmula más que correcta con la que disfrutar con luz apagada una noche de fin de semana. Ahora con algo más de experiencia y un puñado de ideas creativas volando sobre sus cabezas nos traen una precuela con luces y sombras. Sandclaste trae importantes mejoras con respecto a su predecesor a costa de un enfoque amigable.

En Sandlecastle asumiremos el control de Dalila Reyes, una ex espía del gobierno y miembro de la unidad “H.A.D.E.S”, un grupo clandestino de operaciones especiales. Junto a su pelotón responden a una llamada de auxilio en un centro de investigación experimental, donde están sucediendo extraños fenómenos paranormales. Con esta precuela, Invader Studios desea responder algunas de las preguntas inconclusas de su entrega original, y como no, dejar el camino libre para futuras entregas. Sin embargo, el resultado final no es del todo acertado. La premisa se siente floja con diálogos forzados y escenas cinemáticas intrusivas, que trascienden hacia un formato cinematográfico. Considero que no todo es totalmente negativo.

Dentro de sus sombras existen luces, y la tradicional narrativa emergente a través de registros de audio o documentos le sienta de mil maravillas. Concepto quemadísimo en la industria, pero que mantiene ese toque nostálgico. Sandcastle es un juego que tiene mucho material de donde rasgar con personajes misteriosos impulsados por sus propios deseos. Las propias instalaciones o criaturas esconden mucho más de lo que aparentan, y mucho de su potencial pasara desapercibido, sino rastrillamos cada recoveco y burlamos cada brecha de seguridad. Superar la campaña no tomara poco más de 6/8 horas, que puede extenderse si decidimos recoger sus coleccionables o superar sus desafíos para desbloquear bonos, al igual que sucedía con Resident Evil 4. Una más que interesante mecánica con la que re-jugar la aventura, y rascar horas extra.

En lo que respecta a jugabilidad, Daymare 1994 Sandcastle no ha evolucionado en demasía, sino que más bien ha puntualizado ciertas asperezas jugables y técnicas a fin de entregar una experiencia fluida y dinámica. Como resultado de estos retoques sus controles responden con mayor precisión ante las respuestas. De igual forma, las animaciones se sienten naturales y orgánicas con el escenario sin ser tan acartonadas. Existe mayor peso y física en la protagonista y realmente da la sensación de controlar a alguien que intenta sobrevivir a toda una pesadilla. Sin embargo, esto deriva en un ritmo de juego mucho más trepidante con una importante connotación en la acción. Se ha removido por completo esa embriagante dosis de suspenso/terror que predominaba en la aventura original.

Sandcastle se siente como otro “pseudo Shooter con cámara sobre hombros” otro más para añadir al rincón de Resident Evil 4 o Gears of War wanna be. No me malinterpreten, esto no es estrictamente negativo. Jugablemente deja situaciones vistosas. Pero… la estructura del juego es tan marcada. Salas vacías en la que recoger dos o tres objetos para posteriormente ser recibidos por hordas de enemigos reciclados que son esponjas de balas. Simplemente le quita el tono de supervivencia, que tanto esfuerzo hizo su entrega original por mantener intacto. Si bien, los enemigos de Sandcastle son fuertes y evolución en tiempo real con un comportamiento agresivo. Las cuotas de tensión bajan a cero cuando desenfundamos la escopeta o el subfusil para aniquilar a cuantos enemigos encontremos por delante.

Me ha gustado la idea de sus chispazos eléctricos azules o rojos que alteran a los enemigos, y esa necesidad de congelarlos antes de abatirlos. Sin embargo, termina convirtiéndose en una práctica agotadora al ser tan recurrente. Como punto positivo, genera una capa extra de dificultad con la agresividad de los enemigos rojos. Lo que nos lleva a la gran sorpresa, la pulsera criogénica. Como su nombre lo indica, permite congelar momentáneamente a los enemigos para finalmente culminar con los puños o desmembrarlos con un buen disparo. Cabe destacar que este ítem no solo cuenta con una función ofensiva sino también defensiva al activar escudos o preparar emboscadas con minas terrestres. Además, permite resolver algún que otro rompecabezas ambiental al congelar objetos. Asi es, los rompecabezas han regresado, pero con un enfoque más interactivo.

Una de las grandes maravillas de su entrega original era en su estupenda forma de hacernos progresar a base de ingenia, y todo parece indicar que con esta precuela no será distinto. Por lo tanto, tendremos que analizar minuciosamente cada documento, PDA y registro para obtener pistas, como también escanear escenarios y destacar puntos de interés. Sin lugar a dudas, la pulsera criogénica es su mayor novedad y ofrece una amplia rama de mejoras con las que disfrutar en sus tiroteos. Aunque para ello tendremos que acceder a terminales escondidas y seleccionar la mejora de turno. Adicionalmente, las armas también pueden ser modificadas con cargadores, culatas, empuñaduras o compensadores para incrementar sus atributos. Ese toque de Resident Evil le sienta de maravilla. Gran parte de la aventura gira sobre la acción con hordas de enemigos aguardando a la vuelta de la esquina o esperando sorprendernos dentro de una habitación. La munición rara vez escaseara, y con la inclusión de la pulsera criogénica tendremos una interminable fuente de congelamiento o puñetazos a lo Chris Redfield. La labor de Invader Studios es realmente destacable, y ha subido un par de escalones por encima en lo que respecta a visual, pero… ya muestra ciertos desgastes técnicos.

Durante muchos años ha sido bastardeado y sinónimo de una discutible calidad con obras realmente penosas, sin embargo, gracias a la industria independiente el género del Survival Horror ha comenzado a tomar más fuerza que nunca. El cambio de aire ha llegado a Invader Studios, y con Daymare 1994 Sandcastle han transitado un camino pedregoso. Los chispazos de alto voltaje disuelven en un rio de sangre su tono de terror. Aunque en sus entrañas mantiene capsulas reducidas con su sistema de inventario ajustado, rompecabezas interactivos, registros y notas de texto, y una más que conseguida ambientación paranormal. Invader Studios aún necesita pulir un poco más su fórmula para entregar una aventura de la talla de Capcom o Team Silent, pero de momento deja una aventura más que correcta con la que disfrutar y soñar por un mejor mañana.