Género: Aventura.
Desarrolladora: Okomotive.
Editora: Mixtvision.
Fecha de lanzamiento: 17/05/2018.
Precio: $179,99 ARS.
Plataformas: PC.
Disponible en: Steam.
Review: Realizado en su versión de PC con una copia de prensa proporcionada por Mixtvision.
La escena independiente poco a poco va evolucionando para convertirse en un verdadero referente a lo que arte se refiere. Hoy, en día han cambiado la forma de contar historias, gracias a obras maestras como Gorogoa, What Remains of Edith Finch o Inside, pero centrémonos un momento en este último, Playdead no solo es sinónimo de calidad y maestría en plataformas, Puzzles y dirección artística, sino también en recursos narrativos, fueron uno de los pioneros en utilizar el lenguaje visual para transmitir emociones sin soltar una sola palabra o un enorme párrafo textual. A su vez, esto permitió que otros estudios transitaran el mismo camino, algunos no tuvieron tanta suerte, mientras que otros entregaron productos competentes como Black: The Fall e incluso verdaderas genialidades como Little Nightmares o FAR: Lone Sails, (el título que nos compromete el día de hoy).
FAR: Lone Sails se presenta en pantalla como una aventura de exploración vehicular en 2d con ligeros toques de Puzzles, pero la realidad es muy diferente, tras aquella delgada cortina encontraremos una propuesta trascendental. FAR: Lone Sails desarrolla un profundo viaje espiritual y reflexivo por un mundo abandonado que ha perdido todo rastro de humanidad. Sin demasiado esfuerzo construye un escenario post-apocalíptico realmente inmersivo que logra despertar nuestro interés, y no solo esto, sino que también plantea serias dudas. Y eso, eso es lo verdaderamente increíble en este juego.
Los chicos de Okomotive han utilizado efectivamente la escenografía para crear una constante melodía narrativa. Silenciosa y ausente de términos, pero interpretativa con una intensa observación. La cuidada decoración de los pueblos, las antiguas reliquias que dejaron atrás, todos son elementos que esconden grandes misterios y fortalecen sutilmente la trama. Razón, por la que FAR: Lone Sails desarrolla una progresión lenta y pausada, a fuego lento contemplando el atractivo de la soledad, disfrutando de un conmovedor viaje con las nubes como única compañía.
Sin embargo, cada tanto encontraremos objetos de interés, cajas, buzones, barriles, juguetes, radios. Items que afinan la narrativa, pero que también cumplen una función jugable al ser utilizados como combustible para mantener en movimiento nuestro vehículo. Y esto lleva a plantear interrogantes, ¿acaso es sencillo desprenderse de un objeto con valor sentimental? ¿Qué es más importante, llegar al final del túnel o la forma en que lo hicimos? Con este tipo de interrogantes juega FAR: Lone Sails, a pesar de no soltar nunca una palabra, nos invita a construir una armonía persistente entre nuestras acciones y aquel titánico vehículo. Fundirlos en uno mismo para crecer en paralelo.
Cada pequeño Puzzle que superamos no solo abre el camino hacia la nueva zona, sino que también modifica y mejora permanentemente a nuestro elegante velero-móvil para prepararnos para lo peor, los brutales obstáculos climáticos. El viento puede ser un poderoso aliado en los momentos de escases de combustible, pero también un terrible enemigo al entrar en conjunto con la lluvia o nieve. Esa es otra de sus más grandes virtudes, el clima dinámico, aquel continuo cambio entre nubes, lluvia, viento o nieve, simplemente nos demuestra que estamos en un Yermo orgánico y cruel, que no brindara ni un minuto de descanso, y nos castigara con el mínimo error. Afortunadamente, el vehículo, no solo cuenta con literas en las que dormir y fotos familiares, sino que ofrece algunas interesantes mecánicas de juego por la inclusión de una bomba de agua, el soplete o la aspiradora. En base a estos elementos tendremos que reparar el vehículo en caso de que el motor comience a echar llamas, o los circuitos se ven afectados al chocar contra un objeto con su enorme vela. Sin lugar a dudas, FAR: Lone Sails nos hace sentir como un verdadero maquinista, tal vez, el último de nuestra especie que aun permanezca con vida.
En cuanto al mundo, aquel yermo marino post-apocalíptico es simplemente alucinante, tal vez no en cuanto a fidelidad visual se refiera, pero artísticamente es una verdadera maravilla. Entre sus virtudes graficas encontramos la encantadora paleta de colores con esa conservadora tonalidad apagada para representar escenas imposibles, tal y como sucedía con Black: The Fall o Limbo. Los juegos de luces tampoco se quedan atrás, las tormentas son brutalmente despiadadas, pero también son una fuente de belleza natural con su dinámica climatología. Sin lugar a dudas, la representación visual de las tormentas es pura crema y nos hace sentir como un alma en pena que intenta luchar por su vida contra todo pronóstico de victoria.
Para acompañar tan agridulce sensación proporciona una banda de sonido alucinante. FAR: Lone Sails cuenta con una BSO instrumental sumamente inmersiva con unas melodías de piano sencillamente geniales que nos mantendrán absorto en su emocionante viaje.
Pocos juegos tienen la capacidad de trascender y convertirse en algo especial para permanecer en lo más profundo de nuestros recuerdos y FAR: Lone Sails es uno de ellos. Okomotive ha creado lo imposible. Una aventura conmovedora, emocionante y reflexiva con una narrativa impecable, y un diseño artístico alucinante. Tal vez, avanzar por su mundo no suponga ningun reto y los Puzzles se sientan algo sencillos, pero, ese es realmente su cometido. FAR: Lone Sails desea darnos el control de un maquinista que tiene la capacidad para superar cualquier tipo de obstáculo y durante el proceso descubrir un mundo único con las nubes como única compañía.
PALABRAS FINALES
Sin mucho más por agregar, aún restan poco más de 7 meses para que finalice el 2018, sin embargo, FAR: Lone Sails es un serio candidato a juego del año, una verdadero obra de arte y todo un logro de lo que puede ofrecer la escena independiente.
NOTA FINAL: 9.5/10
Puntos Positivos:
- Un atractivo mundo por descubrir.
- La climatología y su efecto en la aventura.
- El uso del lenguaje visual para transmitir su historia.
- Viajar en un vehículo jamás se sintió tan bien.
- La sensación de controlar a un verdadero maquinista.
- La climatología y su efecto en la aventura.
- Artísticamente es simplemente alucinante.
- Una superlativa banda de sonido.
- Algunos Puzzles tienen un diseño brillante.
Puntos Negativos:
- El inexistente soporte para resoluciones ultra-panorámicas.