Título: Warhammer 40k Boltgun
Género: FPS.
Desarrollador: Auroch Digital.
Editor: Focus Entertainment.
Fecha de lanzamiento: 23/05/2023.
Precio: $2,339.10 ARS.
Plataformas: PC, Playstation 4, Playstation 5, Xbox One y Xbox Series S/X.
Disponible en: Steam.
Review: Realizado en su versión de PC con una copia de prensa proporcionada por Focus Entertainment.
Echando la mirada atrás, es inevitable no sentir nostalgia por las joyas que experimentamos en la infancia con ese despertar de los FPS, RTS o los Point-and-Click, y ciertamente, gracias al desarrollo independiente se ha recuperado mucha de esta esencia. Sin ir más lejos, estos últimos años han pasado auténticas joyas influenciadas por Doom, Quake, Heretic o el propio Blood como ser el caso de Amid Evil, DUSK, Into the Pitt, Project Warlock, Prodeus o GRAVEN entre otros tantos. Auténticas maravillas de la industria que recuperan todo eso que hizo grande a los FPS en el pasado con un salvaje ritmo de juego sobre entornos laberinticos. Entre aquel selecto grupo de colosos llega Auroch Digital para llevarnos una vez mas a los 90s a revivir esa época dorada con su más reciente producción, Boltgun, un estupendo old-school Shooter ambientado en el glorioso universo de fantasía oscura de Warhammer 40k. Por lo que la ambientación y el formato de juego le sienta de mil maravillas para representar todo el caos y la brutalidad de los marines espaciales con un elevado tono sangriento y una jugabilidad simple, pero adictiva, que tendrá saltando, troceando por sus entornos pintando las paredes de sangre y disparando a todo lo que se situé sobre la retícula.




Boltgun sucede tras los eventos de Space Marine por lo que asumimos el rol de Malum Caedo, un marine espacial que ha sido enviado junto a su pelotón para controlar la zona, pero han sido salvajemente aniquilados y ahora solo queda abrirse paso machacando a todo lo que encontremos por delante. Y eso será todo. Uno podría pensar que al estar ambientado en el universo de Warhammer serviría de nexo para la llegada de Space Marines 2 al expandir los eventos de esta serie, pero más bien sucede todo lo contrario. La premisa de Boltgun va directo al ruedo, y no se toma el trabajo de formalizar o narrar demasiado los eventos, más bien, tiene un solo propósito, y ese es justamente, desencadenar toda una masacre espacial al dar caza a los Marines Espaciales del Caos y los Señores de la Alteracion. Cada tanto recibimos algunos mensajes emergentes en una ventana a través de nuestra fiel calavera flotante, pero solo quedan en eso. La narrativa se siente algo floja, pero tampoco busca ser su fuerte sino más bien un medio para un fin. Boltgun se suma al tren anti-narrativo, es decir, demuestra que las grandes historias no son algo que se les dé bien a todos los juegos, y de igual forma pueden abrirse camino sin arrastrar personajes o tramas confusas.
Doom sentó los cimientos, y desde entonces se ha experimentado bastante en el género. De todas formas, no puede negarse el placer de controlar a un marine espacial con todo lo que esto implica; equipamiento, espada y el propio movimiento, cada pisada da la sensación de manejar un tanque de guerra. Es simplemente alucinante como han hilado tan fino para mantener acentuados estos conceptos. Mientras deja intuir un personaje cargado de testosterona con una voz bien masculina y unos diálogos escasos, pero atractivos que se pierden por el torrente de acción que genera su formato de juego. Es una experiencia intensa, endiabladamente desafiante y por momentos estresante, pero alocadamente adictivo. Lo que si funciona muy bien son sus escenas cinemáticos de tono retro con esos sprites noventeros tan preciosos que sirven como introducción o culminación a cada episodio, que tampoco serán demasiados. Boltgun cuenta con un total de tres capítulos, que a su vez se dividen en otras 5/6 secciones de juego que tomaran aproximadamente 20 o 30 minutos de superar, que puede extenderse si deseamos explorar a milímetro cada recoveco para hallar secretos u eliminar a todos los enemigos, aunque ya comentamos que el diseño es bastante laberintico e intrincado con un acento marcado en la verticalidad por lo que es fácil perderse y dar un par de vueltas hasta hallar la llave de turno o el camino. Por lo que podemos afirmar que tiene una duración aproximada de 6/8 horas.
A los segundos de entrar notaremos que estamos en un planeta implacable, pero no tanto como nuestro Marine Espacial, que está equipado con su Bolter y la Espada sierra la que aniquilar a toda clase de alimañas: Marines Espaciales del Caos, Demonios o los propios Señores de la Transformación. Un variado grupo de criaturas a los que destripar para pintarnos de rojo carmesí con sus entrañas, y es que la dosis de GORE es bastante elevada, tanto que recordara a Splatterhouse, Strafe o el propio PRODEUS. Techos y paredes goteando sangre. Por lo que Boltgun es un FPS de corte retro brutal con un salvaje nivel de acción tan fluido y constante como si fuese una fábrica de testosterona. Pese a ello, será inevitable no perderse durante minutos por sus entornos dando vueltas en círculos hasta dar con la llave o interruptor de turno. Quizás el diseño de niveles esta algo rebuscado, demasiadas bifurcaciones y un marcado tono laberintico que rompe con la dinámica frenética de su propuesta. De todas formas, esto tiene sus pros al esconder algún que otro secreto que potencia aún más nuestras destrezas y equipamiento para que seamos auténticas máquinas de matar (como si no lo fuésemos de entrada), y será necesario dar con alguno que otro, pues cada tanto se generan campos de purga en los que tendremos que resistir a oleadas tras oleadas de enemigos siendo algunos mucho más resistentes y poderosas.
Afortunadamente contamos con todo un arsenal con los que hacer frente a las alimañas: Bolter automático o pesado, escopetas de poder, lanza-granadas, lanzallamas, rifle de plasma y la flamante espada sierra. Esta uiltima tiene una habilidad especial pasiva con la que saltar frente al enemigo para cercenarlo, y no solo eso sino también tendremos granadas de fragmentación, químicas o de vórtices que nos sacaran de apuros en más de una ocasión. Con esta desmedida potencia de fuego tendremos que dominar el campo de batalla, mientras observamos cómo cada bala viaja salvajemente hasta su objetivo para hacerlo explotar como si se tratasen de piñatas sangrientas. Esto es algo que me ha recordado bastante al reciente Doom, pues cada enemigo al ser abatido dejara todo un popurrí de municiones y consumibles con los que mantener fluida la dosis de acción. Suena a cliché, pero nuestro personaje principal realmente se siente como un comando de un solo hombre o tal vez, como el marine del Doom siendo la espada otra extremidad del cuerpo con un manejo sencillo y dinámico para salir de situaciones apretadas con una buena dosis de combate cuerpo a cuerpo. Al fin y al cabo, seremos recibidos por toda clase de enemigos y no dudaran en flanquearnos o preparar emboscadas lo que puede sentirse como una capa de dificultad extra, especialmente en sus niveles de dificultad más elevados, por lo tanto, tenemos que mantenernos en movimiento; corriendo, saltando y disparando a todo lo que se posicione en la retina. Mención especial para los jefes finales que están revestidos con toda clase de esbirros demoniacos al más puro estilo de Overlord.




Para nuestra fortuna los controles responden a la perfección con una endiablada precisión a cada una de las acciones, que tampoco son demasiadas; echarse a correr, saltar cogerse de una saliente, disparar o lanzar granadas. De todas formas mientras correteamos por aquellas superficies o habitaciones buscaremos botiquines o armadura con la que mantener un alto nivel de vida, y no caer al mínimo error. Quizás se me olvidó mencionarlo, pero Boltgun hace de la violencia un arte. Es más si hasta podemos cercenar enemigos y explotarlos con cada disparo. ¿No suena genial? El toque Manhunt le sienta realmente bien y mantiene la electrizante formula de acción. Por otro lado, al estar ambientado en el universo de Warhammer, la escenografía sigue un tono de Sci-Fi muy conseguido, tanto los escenarios como las armas introducen un diseño post-apocalíptico de corte futurista, una atmosfera agobiante de suspenso y temor por lo que se avecina tras nosotros.
A nivel visual encontramos un diseño de Pixel-Art que busca aflorar la nostalgia. Incluso el menú de navegación y las opciones mantienen ese toque retro con tres configuraciones muy distintivas para mantener los filtros retros con su efecto luminoso, paleta de sprite o el nivel de pixelado en la imagen. Como mencione anteriormente Boltgun cuenta con tres capítulos, a su vez, estos introducen tres zonas de juego totalmente diferentes con sus propias ambientaciones que van desde zonas claustrofóbicas y cerradas hasta otras mayoritariamente abiertas. Zonas que hacen uso máximo de la verticalidad y ofrecen un abanico de posibilidad que incitan el movimiento. Por eso quizás mantienen un diseño algo laberintico. De todas formas, el verdadero protagonista es su elevado nivel de Gore que entrega escenas simplemente brutales, que recordaran a STRAFE o PRODEUS. En pocas palabras permite una visión instantánea de como el escenario se ve afectado por cada gota de sangre. Cada enemigo que abatimos suelta un galón de sangre que tiñe los interiores de un intenso rojo.

El universo de Warhammer 40k continúa expandiéndose, y el salto al formato de los FPS le sienta de mil maravillas con un retro shooter realmente brutal y salvaje. Boltgun es un frenesí de acción y una locura de gore como pocas. Tiene un sensacional diseño old-school, interminables zonas laberínticas, coloridas llaves y un puñado de marines endemoniados a los que machacar, mientras corremos, saltamos y cercenamos con la espada de sierra. Lo cierto, es que Boltgun no hace nada nuevo, y hereda muchas características de otros tantos retro shooters como ser DUSK, Prodeus o Strafe, pero joder que se siente bien y es absurdamente adictivo. Tiene todo lo que un FPS necesita y da la sensación de controlar un auténtico Marine Espacial o una versión pixelada del Doom Guy. Quzásflaquea en la monotonía de su progresión con un marcado ir y venir como producto de su diseño de niveles. Aunque no viene mal para rascar algún que otro secreto o un botiquín extra para mantenernos activos disparando y saltando. Warhammer 40k Boltgun es una gloriosa suma al género de los retro shooters con los que disfrutar un buen fin de semana y despertar a ese crio que tenemos dentro.
Puntos Positivos:
- Mecánicas simples, pero efectivas.
- El ritmo de acción es jodidamente alto y constante.
- La ambientación en el universo de Warhammer funciona de maravilla.
- Una buena dosis de GORE.
- Diseño de niveles intrincado con una clara apuesta por la verticalidad…
Puntos Negativos:
- Por lo que resulta sencillo perderse y dar vueltas en círculos.