Título: Figment.
Género: Aventura.
Desarrollador: BedTime Digital Games.
Editor: BedTime Digital Games.
Fecha de lanzamiento: 22/09/2017.
Precio: TBA.
Plataformas: PC y Nintendo Switch.
Disponible en: Steam.
Review: Realizado en su versión de PC con una copia de prensa proporcionada por BedTime Digital Games.
Durante la aventura tomaremos el control de Dusty, la habida voz de valor de la mente y un guerrero nato, que ha decidido dejar atrás su pasado aventurero para iniciar una vida normal en la comodidad de su hogar junto a Piper, su optimista y fiel compañero. Sin embargo, el destino tenía otros planes. Todo comenzó como un día regular, Dusty plegaba su reposera sobre el patio y se disponía a conseguir algo de hielo para enfriar su bebida, cuando de pronto las garras de la oscuridad tocaron su puerta y tomaron uno de sus objetos más valiosos.
Invadido por un frenesí de locura y desesperación, Dusty se arma de valor e inicia una carrera a contrarreloj para recuperar su libro de recuerdos, pero aquello que comenzó como una simple tarea de búsqueda, inmediatamente se convierte en algo más serio. La mente, aquel encantador lugar que esboza alegría y felicidad está cayendo lentamente en las tinieblas, y de su interior han empezado a surgir nuevos e impuros pensamientos que adoptan la forma de temibles criaturas de pesadilla que propagan el miedo. Una vez más, la esperanza recae en las manos del pequeño gruñón de Dusty,
De esta forma, cobra vida el fantástico universo de Figment. Con la música como protagonista principal, Figment da inicio a un conmovedor relato sobre la vida. BedTime Digital Games construye una trama madura que combina fantasías infantiles con temas serios y existenciales, tales como la muerte, la enfermedad y los traumas. A través de una estética amigable y una fabulosa narrativa musical y ambiental, Figment invita a superar los miedos y hacerle frente a todas esas situaciones trágicas que nos quitan el sueño e inmovilizan de pánico por las noches.
Al fin del día, es un viaje surrealista, pero familiar, por lo más profundo de la mente para descubrirse a uno mismo y recuperar los valores que se han arrebatado por una inesperada jugada del destino. Para evitar caer en el uso innecesario de Spoilers, no profundizare en la trama, pero desde ya es importante destacar que Figment es mucho más que una serie de paisajes bonitos. Es un juego que apuesta duramente al medio narrativo utilizando recursos ambientales, musicales y visuales para transmitir una historia sobre la perdida y la esperanza. Por un lado, demuestra la alegría y felicidad de las pequeñas victorias en un fabuloso escenario surrealista, y al mismo tiempo muestra la desgarradora cara de la angustia y el pesimismo.
A nivel jugable, Figment se introduce en pantalla como una emocionante aventura de acción musical, que utiliza los sonidos como principal medio interactivo. A través de las distintas melodías e instrumentos musicales permite dar vida a flamantes combates y cautivadores momentos. En cuanto a la acción, pues, es tan solo un camino más a seguir, el sistema de combate es básico a mas no poder, y se siente algo tosco, tan solo cargamos con una rustica espada de madera con la que podremos propinar dos tipos de golpes, uno simple y otro cargado, por lo tanto, la dificultad es prácticamente inexistente, al menos durante los combates. Afortunadamente los momentos de acción son escasos. Figment vuelca todo su potencial a la construcción de sus escenarios y la musicalización.
La mente es un gran rompecabezas y BedTime Digital Games ha aprovechado al máximo este concepto para construir el fabuloso mundo de Figment. Cada uno de sus escenarios luce como un enorme Puzzle que espera a ser resuelto, tal es el nivel que incluso permite desplazarnos libremente entre una zona y otra para cargar objetos y abrir un camino que antes permanecía bloqueado. Aunque se echa en falta un viaje rápido para agilizar la transición y no caer en la redundancia.
A fin de cuentas, la progresión consiste en interactuar con elementos comunes, tales como baterías, engranajes y discos metálicos, y de ese modo resolver el Puzzle de turno. Por lo tanto, Figment tira bastante por la lógica e introduce una constante sucesión de Puzzles, tanto ambientales como físicos, por lo que tiende a jugar con el escenario, mover objetos de un extremo a otro. Por momentos escapa de este patrón y se aporta algo de originalidad al introducir a los sonidos y enemigos como un recurso principal, romper cascarones de nueces, utilizar sus ataques para limpiar el terreno o tocar instrumentos y analizar sus notas para componer fantásticas melodías. Sin duda, Figment ofrece diversos retos y momentos de interés, que se adaptan a toda clase de jugadores. Tiene sus momentos de acción con bestias. La lógica tras el funcionamiento de su encantador universo con rompecabezas bien logrados. Y al final del día combina todos estos elementos para explotar todo su potencial en una serie de épicos y temibles combates contra Jefes Finales.
Muchas de sus aspectos jugables funcionan bien, sin embargo, Figment es un juego que gira demasiado tiempo en el Backtracking, por lo tanto, al entrar a una nueva zona inevitablemente tendremos que regresar sobre nuestros pasos para adquirir antiguos objetos que nos permitirán avanzaran. Eventualmente, tiende a generar un estilo de juego algo reiterativo, afortunadamente la escenografía y la variedad de Puzzles o los multiples coleccionables, son elementos eficaces para contrarrestar esta ligera irregularidad de progresión.
Por otro lado, uno de sus atributos más destacables es el apartado visual. Figment utiliza como medio grafico un arte surrealista, lo que permite retratar de manera vistosa y original los distintos puntos y nexos de la mente. Es así como introduce en pantalla una serie de escenarios cautivadores y totalmente dibujados a mano. Ilustraciones coloridas que cargan con una decoración infantil, pero familiar que dan vida a un mundo de magia y esperanza. La amalgama entre ficción y realidad es totalmente eficaz y logra generar asombro en cada paso. No todos los días se encuentran arboles revestidos de instrumentos musicales, violines, trompetas, cajas musicales, puentes tapizados en lápices o relojes, y molinos de vientos cubiertos por libélulas.
Son alguno de los tantos detalles que hacen de Figment una experiencia visual totalmente única. Pero eso no es todo. Los personajes principales no se quedan atrás, tanto Dusty, como Piper exponen grandes dosis de carisma y brillan por sus diálogos tan naturales. Incluso las criaturas de pesadilla tienen sus momentos de fama. A través de sus fantásticas voces y canciones instrumentales infunden el terror en cada una de sus repentinas apariciones. Lo que nos lleva a otro de sus puntos más fuertes, la banda sonora y el trabajo de audio.
Figment es una aventura musical, utiliza los sonidos como medio interactivo. Tanto para la resolución de Puzzles como para combatir a los Jefes Finales. Por esta razón juega con distintos géneros que se adaptan a los sucesos de la pantalla. En ocasiones aporta melodías suaves a base del piano o la trompeta, mientras que en otros recurre a sonidos rítmicos y emocionantes con el uso de la guitarra y un rock progresivo. Sin duda, la variedad de estilos es enorme y genera un alto grado de inmersión. Las canciones son tan poéticas que se quedaran fundidas en nuestra memoria.
En conclusión, Figment es mucho más que una serie de paisajes bonitos. Al final del día, es una aventura que desarrolla una trama seria, pero con ciertos toques infantiles para mantener en sintonía la escenografía. Inicia un profundo viaje por los recovecos de la mente para dar vida a un mundo extrañamente surrealista, pero familiar. Una decoración fabulosa con una estética amigable de colores vistosos, y personajes encantadores, pero también colmado de atemorizantes criaturas y trampas mortales. Tanto la narrativa como el apartado audiovisual son soberbios y lucen momentos fantásticos. En lo jugable deja un sabor agridulce, tiene momentos de acción algo toscos, pero la mayor parte de la aventura gira entorno a la lógica y la resolución de los Puzzles, de los cuales todos son excelentes con un buen uso del ambiente y la física. Es simplemente asombroso ver como el escenario se reconstruye con cada una de nuestras acciones.
Sin embargo, la progresión del juego tiende a tirar mucho del Backtracking, tendremos que ir y venir constantemente en busca de objetos y elementos para avanzar, y esto tiende a cortar con el rollo tan dinámico e inmersivo que infunde la estética y sus rítmicas melodías. Eventualmente, logra superar este deslizas con una gran variedad de situaciones y momentos de interés como los Jefes Finales y la interacción con instrumentos musicales que desencadenan en una gran diversidad de Puzzles. Pero, el Backtracking es algo a tener en cuenta.
Sin mucho más por agregar, Figment es un juego sensacional que desborda carisma y personalidad en grandes dosis. Sin duda, una de las grandes sorpresas del 2017.
NOTA FINAL: 8.5/10
Puntos Positivos:
- Un encantador relato sobre la vida y la muerte.
- La construcción de los escenarios.
- Puzzles bien pensados y de gran variedad.
- Una aventura musical como ninguna otra.
- Un apartado audiovisual impecable.
Puntos Negativos:
- La progresión gira demasiado tiempo en el Backtracking.
- El sistema de combate es algo tosco.